Un Certificado de Antigüedad es un documento que acredita la fecha de construcción de una edificación existente. Para el caso de las viviendas, este documento debe ser firmado por un Arquitecto o Arquitecto Técnico.
Puede recibir otros nombres. Por ejemplo Certificado de Obra antigua, Certificado de Obra nueva por Antigüedad o, simplemente, Certificado de Obra nueva. Conviene diferenciarlo de un Certificado Final de Obra, cuyas características y responsabilidades son diferentes.
¿Para que sirve un Certificado de Antigüedad?
La función principal del Certificado de Antigüedad es permitir la inscripción de una vivienda en el Registro de la Propiedad. Habitualmente tratan de viviendas o edificios completos. También pueden referirse a ampliaciones de vivienda posteriores o construcciones auxiliares (piscinas, barbacoas, trasteros, etc…). En ocasiones, los bancos pueden solicitarlo antes de conceder un préstamo hipotecario.
¿Qué información debe contener un Certificado de Antigüedad?
El contenido principal de un Certificado de Antigüedad es la fecha de finalización de las obras. A partir de este dato, se puede verificar si han transcurrido los plazos necesarios por la Legislación. Sin embargo, este dato no es suficiente. También es necesario incluir el número de plantas, la superficie ocupada y la superficie edificada de la vivienda. Por este motivo lo habitual es encargar un Certificado de Antigüedad y superficies.
Para ello, es necesario que el Técnico efectúe una medición exacta de cualquier construcción existente en la parcela. De este modo, posteriormente podrá realizar el Levantamiento de Planos detallado de toda la vivienda y calcular las superficies.
¿Como se determina la antigüedad de una obra?
La fecha de finalización de la construcción es el aspecto más delicado de un Certificado de Antigüedad. Por tanto, debemos poder acotarla mediante pruebas que sean lo más claras y objetivas posible. Para ello disponemos de varios métodos:
- Vuelos o fotografías aéreas de Organismos de reconocido prestigio. Servicios Cartográficos Autonómicos, Centro Nacional de Información Geográfica, Archivos fotográficos de las diputaciones, etc. Algunos de ellos disponen de información gratuita y otros de pago.
- Licencias de obras o documentos disponibles en los Ayuntamientos.
- Facturas, Planos o documentación relacionada con la construcción original de la vivienda.
- Certificación Catastral con inclusión de la fecha.
- Características de los materiales empleados o técnicas constructivas que permitan obtener una edad mínima de la construcción.
- Ensayos de laboratorio para determinar la antigüedad mínima de un material.
- Facturas o contratos de suministros (agua, luz, internet, teléfono, etc…)
- Contratos privados de compraventa o Escrituras no inscritas en el Registro.
- Apariciones en publicaciones locales, prensa, revistas de la época.
A partir de cada uno de estos métodos se puede obtener una fecha con un grado de fiabilidad diferente. El Técnico encargado del Certificado de Antigüedad, deberá valorar el procedimiento más indicado para cada caso particular.